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Buen viaje al Maestro !!! Silo falleció el 16 de septiembre del 2010


6 de enero de 1938–16 de septiembre de 2010



Silo falleció el 16 de septiembre del 2010 alrededor de las 23 horas de Punta de Vacas. Estaba lúcido, acompañado por familiares cercanos y sin dolor hasta el final.
Muchos amigos se juntaron en diferentes partes del mundo para desearle con el más profundo cariño el mejor tránsito posible de fusión con la Luz.
Paz en el corazón, luz en el entendimiento.

Ojalá seamos dignos de la desesperada esperanza



Palabras de agradecimiento, de Eduardo Galeano al recibir el premio Stig Dagerman, en suecia, el 12 de septiembre de 2010:

Querido Stig:
  Ojalá seamos dignos de la desesperada esperanza.

Ojalá podamos tener el coraje de estar solos y la valentía de arriesgarnos a estar juntos, porque de nada sirve un diente fuera de la boca, ni un dedo fuera de la mano.

Ojalá podamos ser desobedientes, cada vez que recibimos órdenes que humillan nuestra conciencia o violan nuestro sentido común.

Ojalá podamos merecer que nos llamen locos, como han sido llamadas locas las Madres de Plaza de Mayo, por cometer la locura de negarnos a olvidar en los tiempos de la amnesia obligatoria.

Ojalá podamos ser tan porfiados para seguir creyendo, contra toda evidencia, que la condición humana vale la pena, porque hemos sido mal hechos, pero no estamos terminados.

Ojalá podamos ser capaces de seguir caminando los caminos del viento, a pesar de las caídas y las traiciones y las derrotas, porque la historia continúa, más allá de nosotros, y cuando ella dice adiós, está diciendo: hasta luego.
   

Ojalá podamos mantener viva la certeza de que es posible ser compatriota y contemporáneo de todo aquel que viva animado por la voluntad de justicia y la voluntad de belleza, nazca donde nazca y viva cuando viva, porque no tienen fronteras los mapas del alma ni del tiempo.
 

Eduardo Galeano

Taller: matriz y raíz de la violencia




MÓDULO I: ¿QUÉ ES LA VIOLENCIA?

Para
responder, anotar lo primero que venga a la cabeza.
NO PENSAR. No se trata de dar una definición doctrinaria ni teórica de ningún tipo, sino de ver qué cree uno que es la violencia. Trabajar rápido.

1. ¿Qué creo que es la violencia? ¿Porqué?

Una vez respondida, se intercambia con el grupo y se elabora una respuesta común.

Las respuestas que se repitan serán la respuesta común.
Para eso habrá que ver si no se dice lo mismo con otras palabras.

Las respuestas individuales que difieran de la común o que no puedan reducirse a la común, se escriben a continuación de la  respuesta común.

O sea, se recoge todo lo que cada uno escribió y se destaca lo común.

Cuando cada grupo tiene sus respuestas, las comparte y ahí hacemos la respuesta común y vemos las individuales.

2. ¿Qué siento cuando me siento violentado? ¿porqué?

Intercambio.















MÓDULO II: LAS FORMAS DE LA VIOLENCIA. REVISIÓN DE LAS SITUACIONES EN QUE SE MANIFIESTA LA VIOLENCIA Y SUS MODOS.

1. ¿Qué formas asume la violencia? ¿cómo veo que se manifiesta?

2. ¿Quiénes actúan esas formas de violencia? ¿Quiénes las ejercen o desarrollan?

3. ¿En qué radica la violencia? ¿Qué es lo que hace violenta la violencia? ¿Qué es lo que la distingue o califica como violencia?


MÓDULO III: LA RAÍZ DE LA VIOLENCIA
(Se trabaja con una matriz imaginaria para sentir y reconocer ese sentimiento. se trabaja solo. Se trata de sentir y describir lo que se siente)


1. ¿Qué cosas quiero? Cosas cotidianas, tangibles, las que necesitamos para vivir y disfrutar la vida, y también intangibles imaginarios.

2. Teniendo a la vista las cosas que quiero, atiendo a las sensaciones que se me repiten para cada cosa que quiero. Esto es, utilizo el querer cada cosa para poder registrar cómo es el querer, cómo siento el querer algo. Ya no me interesan las cosas que quiero, sino el querer las cosas.

3. Vuelvo a imaginar alguna de las cosas que quiero y siento que las quiero, con claridad.
Ahora imagino que alguien se opone a mi querer ¿Qué siento ante esa oposición? ¿Qué me produce? ¿Qué me pasa?

4. Tratar de precisar lo que siento cuando alguien se opone a mi intención. Cotejo con mi respuesta a la pregunta 2 del módulo I.

5. Evoco situaciones en las que quiero que alguien se adhiera, someta o converja con mi intención, que el otro haga lo que quiero.

6. Imagino que busco un acuerdo con la otra persona, trato de persuadirla o llegar a un acuerdo. Lo que interesa es qué siento o me pasa con esa actitud.

7. Evoco la situación de ser violentado.
Me opongo a la violencia del otro: resisto. Opongo una fuerza igual a la que siento que ejerce sobre mí, neutralizo con una acción externa la fuerza que ejerce sobre mí.

8. Evoco la situación de violentarme a mí mismo.
¿Cómo sería resistir mi propia violencia, oponer una fuerza igual que neutralice?

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Nota del autor

La tendencia en talleres y seminarios es a pensar y elaborar intelectualmente, manteniendo el hábito de racionalizar. Eso hace que se dé tiempo para poder “profundizar”. Pues bien, en este taller hay que trabajar rápido, no profundizar nada. Responder lo primero que viene a la cabeza, ponerlo en el papel e intercambiar. Después, se reflexiona, cuando se ha cotejado con la experiencia ajena y la propia. Si no aparecen las respuestas que “uno quiere” o a uno “le gustan”, no importa. Importa que aparezcan respuestas con encaje y para eso se necesita presión y tiempo. Pero primero, presión para que se internalice la pregunta, para que se geste la inquietud interna que pone en marcha los mecanismos más profundos de conciencia. Metida la pregunta en la corriente de conciencia, con el tiempo entrega su resultado. Lo que necesitamos. Bajo esas dos condiciones la conciencia entrega por sí misma las respuestas con encaje. Entonces, puede que uno no encuentre una respuesta “satisfactoria”. No importa, la pone. Será la misma insatisfacción la que mantenga la búsqueda activa y bien durante el taller o después, la respuesta aparece. Si esta dinámica no se respeta, el taller pierde la fuerza creadora que impone a los participantes.
Ruego comentarios sobre los resultados, el manejo e innovaciones que pueda ocurrírsele a quien lo aplique.



Néstor Tato – Buenos Aires – Argentina 



  

Reseña: El Chamanismo y las técnicas arcaicas del éxtasi

Considerado como la Biblia del chamanismo. Tras 50 años de su primera edición sigue
siendo libro de referencia e insuperado.
Título:
El Chamanismo y las técnicas arcaicas del éxtasis
Autor: Mircea Eliade

Perfiles: Para estudiosos del chamanismo. Para universitarios que cursen estudios relacionados con el
tema (chamanismo, sanación en otras sociedades, pensamiento de culturas pre-letradas). Para personas
que quieran curarse de ideas demasiado folklóricas sobre el chamanismo arcaico. Para bibliófilos ávidos de
obras maestras.
Nivel: Técnico y denso, pero de gran interés en cada una de sus partes, capítulos y temáticas.
Palabras clave: Chamanismo (orígenes, práctica, simbología), Siberia, éxtasis, culturas chamánicas, ritos
de paso, ceremonias de iniciación, pueblos ágrafos, sueños inicáticos, adquisición de poderes, árbol del
mundo (axis mundi)

Redactado a finales de los años 40 y publicado en el año 1951, este fue el primer estudio sistemático
dedicado al chamanismo, y hoy en día se sigue considerado como el principal tratado, aun no superado,
sobre este técnica arcaica del éxtasis. En realidad también fue el primer estudio del tema abordado desde
una perspectiva esencialmente religiosa, dejando de lado las interpretaciones psicológicas, sociológicas o
etnográficas predominantes durante la mayor parte del siglo XIX y XX.
Ciertamente, hasta la aparición del tratado de Eliade el chamanismo había sido visto como una forma de
esquizofrenia, o puramente como un rol social, de tipo mágico, dentro de la estructura de una sociedad
arcaica, o estudiado simplemente desde la perspectiva de descriptiva: vestidos, utensilios, danzas,
leyendas...
Eliade, que había experimentado experiencias extáticas durante su juventud en Hardwar, disponía del
conocimiento de la experiencia visionaria, de la que carecían otros estudiosos del tema -que habían
intentando descifrar el chamanismo desde perspectivas ajenas a lo religioso, o sea, obviando que el
chamanismo era una de las formas de relación del ser humano con lo sagrado.
Definiendo el chamanismo como la práctica extática que sirve de nexo con lo sagrado en las sociedades
pre-letradas, el libro expone mitos, técnicas y leyendas, las compara, diserta sobre su función religiosa del
chamán, sobre su papel sanador y aglutinador, su importancia como cabeza de tribu en las sociedades más
primitivas, su función de terapeuta y de vidente.
Abarcando los continentes Asiático, Europeo, Americano y Africano, y disponiendo de una cantidad de
información literalmente desconcertante, Eliade estructura el libro exponiendo la crisis existencial que
conduce a la vocación chamánica, la adquisición de poderes, ritos iniciáticos, la cosmología del universo
chamanístico, el simbolismo asociado a esta práctica (el árbol del mundo, el puente que conduce al 'otro
mundo'), el uso del tambor... en definitiva, infinidad de información sobre esta técnica arcaica del éxtasis.
En lo referente a los enteógenos, el libro de Eliade ha sido discutido por la escasa información que contiene
sobre este tipo de sustancias. En todo caso ha de considerarse que este estudio fue escrito y publicado a
principios de los años 50, cuando los estudios etnobotánicos se encontraban aun en sus albores. Si bien
con el paso de los años Eliade reconoció la importancia de las sustancias visionarias, no tuvo tiempo para
rehacer su estudio a la luz de las nuevas aportaciones presentadas por la etnobotánica, aglutinadas por la
ingente labor de R.G. Wasson.
Recomendable desde su mismo inicio, este libro es un clásico para toda persona interesada en el fenómeno
del chamanismo.
Índice
Prefacio
Advertencia a la segunda edición
Generalidades. Métodos de reclutamiento. Chamanismo y vocación mística
Aproximaciones
El otorgamiento de los poderes chamánicos
Reclutamiento de los chamanes en Siberia occidental y central
Reclutamiento entre los Tunguses
Reclutamiento entre los Buriatos y los Altaicos
Transmisión hereditaria y busca de los poderes chamánicos- 2 -
Chamanismo y psicopatología
 
Enfermedades y sueños iniciáticos
Enfermedad-iniciación
Éxtasis y visiones iniciáticos de los chamanes yakutes
Sueños iniciáticos de los chamanes samoyedos
La iniciación entre los Tunguses, los Buriatos, etc.
La iniciación de los magos australianos
Paralelos entre Australia y América del Sur
Despedazamiento iniciático en América del Norte, América del Sur, África e Indonesia
Iniciaciones de los chamanes esquimales
La contemplación de su propio esqueleto
Iniciaciones tribales y sociedades secretas
 
La obtención de los poderes chamánicos
Mitos siberianos acerca del origen de los chamanes
La elección chamánica entre los Goldes y los Yakutes
La elección entre los Buriatos y los Teleutes
Las mujeres-espíritus protectoras del chamán
El papel de las almas de los muertos
Ver a los espíritus
Los espíritus auxiliares
"Lenguaje secreto". "Lenguaje de los animales"
La busca de los poderes chamánicos en América del Norte
 
La iniciación chamánica
La iniciación entre los Tunguses y los Manchúes
Iniciación de los Yakutes, Samoyedos y Ostiacos
La iniciación entre los Buriatos
Iniciación de la chamana araucana
La ascensión ritual a los árboles
El viaje celeste del chamán caribe
Ascensión por el arco iris
Iniciaciones australianas
Ritos de ascensión
El simbolismo del indumento y del tambor chamánicos
Notas preliminares
El indumento siberiano
El indumento buriato
El indumento altaico
Los espejos y los gorros chamánicos
Simbolismo ornitológico
El simbolismo del esqueleto
Renacer de sus huesos
Las caretas chamánicas
El tambor-chamánico
Indumentos rituales y tambores mágicos en todo el mundo
El chamanismo en el Asia Central y Septentrional
II. Curaciones mágicas. El chamán psicopompo
Llamamiento y busca del alma: Tátaros, Buriatos y Kirghizes
La sesión chamánica entre los Ugrios y los Lapones
Sesiones entre los Ostiacos, los Yurak y los Samoyedos
Chamanismo entre los Yacutes y los Dolganes
Sesiones chamánicas entre los Tunguses y los Orotchi
El chamanismo yukagir
Religión y chamanismo entre los Koryacos
El chamanismo entre los Chukchi
Chamanismo y cosmología
Las tres zonas cósmicas y el Pilar del Mundo
La Montaña Cósmica- 3 -
El Árbol del Mundo
Los números místicos 7 y 9
Chamanismo y cosmología en el área oceánica
El chamanismo norteamericano y suramericano
El chamanismo entre los Esquimales
Chamanismo norteamericano
La sesión chamánica
La cura chamánica entre los Paviotso
Sesión chamánica entre los Achumawi
Él descenso a los Infiernos
Las cofradías secretas y el chamanismo
El chamanismo suramericano: diversos rituales
La curación chamánica
Antigüedad del chamanismo en el continente americano
 
El chamanismo en el sureste asiático y en Oceanía
Creencias y técnicas chamánicas entre los Semang, los Saki y los Jakun
El chamanismo en las islas Andamán y Nicobar
El chamanismo malayo
Chamanes y sacerdotes en Sumatra
El chamanismo en Borneo y Célebes
La "barca de los muertos" y la barca chamánica
Viajes de ultratumba entre los Dayacos
Chamanismo melanesio
Chamanismo polinesio
 
Ideologías y técnicas chamánicas de los indoeuropeos
Notas preliminares
Las técnicas del éxtasis en los antiguos germano
La Grecia antigua
Escitas, Caucáseos e Iranios
La India antigua: ritos de ascensión
La India antigua: el "vuelo mágico"
El "tapas" y la "dîksâ"
Simbolismos y técnicas "chamánicos" en la India
El chamanismo en algunas tribus aborígenes de la India
   
Simbolismos y técnicas chamánicos en el Tibet y en la China
Budismo, tantrismo y lamaísmo
Prácticas chamánicas entre los Lolo
El chamanismo entre los Mo-so
Simbolismos y técnicas chamánicas en China
Mongolia, Corea, Japón
   
Mitos, símbolos y ritos paralelos
El perro y el caballo
Chamanes y herreros
El "calor místico"
El "vuelo mágico"
El puente y el "paso difícil"
La escala. El camino de los muertos. La ascensión
Conclusiones
La formación del chamanismo nor-asiático
Epílogo
Notas
"El chamán es a la vez teólogo y demonólogo, especialista del éxtasis y curandero, auxiliar de la caza,
protector de la comunidad y de los rebaños, psicopompo y, en algunas sociedades, erudito y poeta".
Mircea Eliade
Contraportada - 4 -
    El estudio del complejo fenómeno chamánico es inagotable. En la actualidad existe una importante
bibliografía sobre el tema, pero casi toda ella lo analiza desde el punto psicológico, sociológico o etnológico.
El presente libro es el primer intento de análisis que aborda dicho fenómeno dentro del campo de la historia
de las religiones. Su misión es sintetizar las diferentes investigaciones (reuniendo los resultados de la
etnología, la psicología y la sociología, sin desdeñar las aportaciones del filósofo y del teólogo), pero usando
métodos y perspectiva propios, ya que no sólo ofrece la historia (orígenes, formación, influencias exteriores,
comparación en el espacio y en el tiempo) del fenómeno religioso, sino que presenta la visión de su
morfología en el momento del análisis. Pero este estudio va más allá: además de organizar la
documentación histórica, "única que garantiza su carácter concreto", trata de desentrañar las situaciones
límite del hombre, es decir, que aunque no se logre necesariamente la perspectiva cronológica -el cuadro
místico de un determinado momento puede repetirse por miles de años-, lo importante es lograr lo concreto
histórico y revelar lo que hay de transhistórico en el hecho religioso en cuestión.
    En esta obra se define ampliamente el chamanismo y, al analizarlo como una de las técnicas arcaicas del
éxtasis, siendo a la vez "mística, magia y religión", se presenta tanto en sus distintos aspectos históricos
como en los culturales. Su ideología, su simbolismo, sus mitologías y sus técnicas son, igualmente,
estudiadas por Eliade, cuya obra como historiador de las religiones es bien conocida
Libros relacionados
Chamanes a través de los tiempos. Quinientos años en la senda del conocimiento (Varios Autores)
Este libro ofrece la perspectiva que occidente ha tenido sobre el chamanismo a lo largo de los últimos
cinco siglos. Compuesto por artículos de diversos autores, este estudio no deja aspecto, detalle o
perspectiva del chamanismo sin abordar. Uno de los mejores libros para tener una perspectiva amplia,
clara y completa sobre el chamanismo.
Vida de María Sabina (Álvaro Estrada)
Biografía sobre María Sabina, la conocida mujer mazateca que ofició la primera velada con hongos
enteogénicos en la que participó Wasson. Escrita por un convecino suyo, conocedor del mazateco y el
español, está considerado el libro más honesto sobre Mª Sabina
Los Indios de México. Antología (Fernando Benítez)
Excelente compilación de textos del autor sobre el chamanismo mexicano, tanto relacionado con
enteógenos como con prácticas que se valen en otras técnicas. Un capítulo dedicado a María Sabina,
otro al peyote y los huicholes, tiene mucha información sobre la práctica, canciones y rol del chamanismo
en culturas mexicanas supervivientes a la colonización.
Los chamanes de la prehistoria (Jean Clottes & David Lewis-Williams)
Sugerente y renombrado estudio sobre la posible relación entre los estados alterados de conciencia, el
chamanismo y las pinturas de arte rupestre.
Ayahuasca visions. The religious iconography of a Peruvian shaman (Pablo Amaringo & Luis Eduardo
Luna)
Magnífico libro con ilustraciones de pinturas basadas en experiencias con ayahuasca. Los dibujos los ha
realizado un chamán peruano, Pablo Amaringo. Cada imagen va acompañada de un texto, en inglés,
explicando la simbología de los animales y seres que aparecen en ellas.

LA MITOLOGÍA CHAMÁNICA DEL CABALLO

                                                                                                                                       
El caballo galopa sobre la llanura desnuda. El labio de fuego del sol besa su pelambre. Plumas del viento
acarician sus crines. El enérgico cuadrúpedo se detiene. Y bufa, cocea, libre, salvaje. Dentro de su
anatomía caliente pululan sus símbolos. El caballo como manifestación del movimiento cíclico de la vida,
por ejemplo. Míticos corceles surgen de las ondas del mar luego de ser delineados por el tridente de
Neptuno. Seres que emergen del caos amorfo de las profundidades marinas; seres que expresan la vida
creada, la forma viviente. Para Paul Diel, el caballo es expresión simbólica del instinto, del volcán del deseo
desenfrenado. En muchos antiguos ritos, una cuadriga de cuatro caballos es sacrificada como ofrenda al
sol. Los romanos lo consagran al dios guerrero Marte. Para los hijos de la Roma Eterna, la visión de un
caballo es presagio de guerra. En numerosas fábulas y leyendas, los caballos previenen a los caballeros;
son clarividentes. Según Jung, el brioso cuadrúpedo es encarnación del costado mágico del hombre, "la
madre en nosotros", la intuición del inconciente. De la aureola mágica del caballo proviene la creencia de
que la herradura es señal de buena suerte. Pero el caballo también galopa en la imaginación mítica como
animal ctónico-funerario, con fuerte participación en la mitología y el ritualismo chamánicos. Este pliegue del - 5 -
simbolismo del caballo es enfatizado por Mircea Eliade, el gran historiador de la religiones. En la sección de
Simbolismo animal de Temakel, presentamos ahora las precisiones sobre la relación entre el caballo y el
chamanismo que Eliade talla en su clásica obra El chamanismo y las técnicas arcaicas del éxtasis. Los
dibujos del bello animal que acompañan al texto nacen de la mirada recreadora de Cecilia Novello, joven
artista argentina.
   Y el caballo regresa a su cabalgata, a su galope. El galopar mágico donde la llanura roza ventanas
intangibles entre las nubes...
Esteban Ierardo
LA MITOLOGÍA CHAMÁNICA DEL CABALLO
Por Mircea Eliade

Animal funerario y psicopompo por excelencia el caballo es utilizado por los chamanes, como medio para
obtener el éxtasis, esto es, la "salida de uno mismo" que hace posible el viaje místico. Este viaje místico no
tiene forzosamente un rumbo infernal: el caballo permite a los chamanes volar por los aires y llegar al Cielo.
No es el carácter infernal y funerario el que domina la mitología del caballo: éste es una imagen mítica de la
Muerte y, en consecuencia, pertenece a las ideologías y a las técnicas del éxtasis. El caballo lleva al difunto
al más allá: realiza la "ruptura de niveles", el paso de este mundo a los otros mundos, y por esto desempeña
también un papel de primer orden en determinadas clases de iniciación masculina (los "Mannerbunde").
   El caballo -esto es, el palo cabeza de caballo- es utilizado por los chamanes buriatos en sus danzas
extáticos. Ya hemos advertido una danza análoga durante la sesión de las macchis araucanas. Pero la
difusión de la danza extática cabalgando con un palo con cabeza de caballo está mucho más extendida.
Entre los Batak, con motivo del sacrificio del caballo en honor de los antepasados, cuatro bailarines danzan
sobre sendos palos que tienen forma de caballo. También en Java y en Bali el caballo está asociado a la
danza extática. Entre los Garo, el caballo es parte del ritual de la recolección. Para hacer el cuerpo del
caballo empléanse tallos de plátano, y para las patas y la cabeza bambúes. La cabeza se coloca en un palo
que un hombre sostiene de modo que le llegue a la altura del pecho. Con un paso pesado, el hombre
ejecuta una danza salvaje mientras que, vuelto hacia él, el sacerdote baila fingiendo que se dirige al
"caballo".
   V. Elwin ha observado un ritual análogo entre los Muria de Bastar. El gran dios gongo Lingo Pen posee,
en su santuario de Semurgaon, muchos "caballos" de madera. Con motivo de la fiesta del dios, estos
"caballos" son conducidos por médiums y usados, bien para provocar el trance extático, bien como
auxiliares en la adivinación. "Observé, en Metawand, durante varias horas, las grotescas cabriolas de un
médium que llevaba en hombros un caballo de madera que representaba al dios de su clan, en Bandapal,
mientras nos abríamos camino en la selva, para Manka Pandum (consumación ritual de los mangos), otros
médium que llevaba también en sus hombros un caballo imaginario, ir al paso, caracolear, piafar y cocear
ante mi coche que avanzaba lentamente. ‘Lleva al dios en su espalda -me dijeron- y no puede dejar de
bailar durante varios días seguidos.’ Durante una boda, en Malakot, vi a un médium montar en un curioso
caballo de madera; vi a otro, al sur, en la región de Dhurwa, bailar a horcajadas sobre un caballo de madera
parecido al anterior. En los dos casos, si algo turbaba el desarrollo de la ceremonia, el jinete caía en trance
y podía entonces descubrir la causa sobrenatural del desorden."
En otra ceremonia, el Laru Kaj de los Gond-Pardhan, los "caballos del dios" ejecutan una danza extática.
Recordemos también que muchos pueblos aborígenes de la India representan a muertos a caballo; los Bhil,
por ejemplo, o los Korku que graban en tablillas de madera unos jinetes, y los depositan junto a las tumbas.
Entre los Muria, los funerales van acompañados de cantos rituales, en los que se cuenta cómo el muerto
llega al otro mundo montado en un caballo. Se habla de un palacio en cuyo centro hay un columpio de oro y
un trono de diamante. El muerto es llevado hasta allí por un caballo de ocho patas. Y ya sabemos que el
caballo octópodo es típicamente chamánico. Según una leyenda buriata, una mujer joven toma por segundo
esposo al espíritu ancestral de un chamán, y tras este matrimonio místico, una de las yeguas de su
acaballadero pare un caballo de ocho patas. El marido terrestre le corta cuatro. La mujer exclama: "¡Ay, era
mi caballito en el que cabalgaba como una chamana", y desaparece, volando, para ir a establecerse en otra
aldea. Posteriormente se convirtió en el espíritu protector de los Buriatos.
   Los caballos octópodos o acéfalos aparecen en los ritos y los mitos de las "sociedades de hombres", ya
germánicas, ya japonesas. En todos estos conjuntos culturales, los caballos polípodos o los caballosfantasmas desempeñan una función a la vez funeraria y extática. También en relación con la danza extática
-pero no forzosamente "chamánica" se halla al caballo de madera ("Hobby Horse").
   Pero incluso cuando el "caballo" no aparece en la sesión chamánica, está simbólicamente presente en las
crines de caballo blanco que allí se queman o en una piel de yegua blanca sobre la que el chamán se
sienta. Quemar pelos de caballo equivale a evocar el animal mágico en el que el chamán ha de ir al más
allá. Las leyendas de los Buriatos hablan de los caballos que Ilevan a los chamanes muertos hasta su
nueva morada. En un mito yakuta, el "diablo" vuelve del revés su tambor, se sienta encima, lo agujerea tres
veces con su vara y el tambor se transforma en una yegua de tres patas que le lleva hacia el Oriente.- 6 -
   Estos pocos ejemplos muestran cómo ha utilizado el chamanismo la mitología y los ritos del caballo:
psicopompo y funerario, el caballo facilitaba el trance, el vuelo mágico del alma a las regiones prohibidas. El
"galope" simbólico significaba el abandono del cuerpo, la "muerte mística" del chamán. (*)
(*) Fuente: Mircea Eliade, El chamanismo y las técnicas arcaicas del éxtasis, México, Ed. Fondo de Cultura
Económica, 1986, pp.359-361.
Ilustraciones: Todos los dibujos de caballos que ilustran este momento de Temakel son obra de © Cecilia
Novello, joven artista argentina